Desde el surgimiento de Rombos en 2017, el trío compuesto por Álvaro Díaz, Charly Fariseo e Ignacio Duarte se propuso hacer música fuera del espectro convencional de lo que hace comúnmente una banda. El diseño sonoro fue su mejor aliado, con el cual pudieron colaborar con proyectos como La Metáfora de los Sonidos, un recopilado de canciones creadas a partir del primer banco de sonidos de instrumentos precolombinos en Latinoamérica (proyecto que trabajaron en conjunto con los Museos del Banco Central de Costa Rica).

El valor cultural de esta producción motivó a los artistas a seguir investigando sobre las raíces musicales de la región y una de las paradas obligatorias que encontraron en el camino fue la del calipso caribeño. Gracias a esto nació Chantuelle Beat, un proyecto de preservación del patrimonio inmaterial sonoro del Caribe Costarricense. La idea de la banda fue generar una librería de sonidos de calipso compuesta por samples de banjo, conga, quijongo, guitarra y bajo eléctrico. En esta nota les contamos cómo lo hicieron y la importancia de este gran trabajo.

Rombos se caracteriza por tocar ritmos de música electrónica, alternative dance y pop, por lo que tuvieron que buscar un grupo que tocara calipso para generar esos sonidos. Así fue como dieron con Kawe Calypso, una banda de calipsonians heredera del gran legado musical de la comunidad de Cahuita (casa del legendario Walter Ferguson), en el Caribe Sur de Costa Rica. Además de componer e interpretar calipsos, los miembros de Kawe se han dedicado a enseñar el ritmo a niños y jóvenes de su comunidad a través del proyecto “Calypso Cahuita Youth” (el cual es único en el país).

Con el apoyo del programa Proartes, del Teatro Popular Melico Salazar y el Ministerio de Cultura y Juventud, estos artistas lograron grabar una librería de sonidos con 96 pistas de audio disponibles para escuchar y descargar gratuitamente en SoundCloud. Además, el mismo presupuesto funcionó para realizar un documental que retrata la experiencia de estos músicos desde los lentes de la productora La Bestia Films. Este audiovisual fue presentado el pasado jueves 18 de julio en el Centro Cultural España y pronto estará disponible en línea.

Las tomas del documental van acompañadas con un exquisito sonido compuesto por Rombos, ya que utilizaron canciones que realizaron con la misma librería de sonidos que recolectaron. Algo así como remixes de sabor electrónico con bases marcadas de calipso. Además, la historia cuenta con gran cantidad de datos y detalles que retratan la situación del calipso en la región, pero principalmente, su camino por las faldas de la costa caribeña.

El motivo primordial del proyecto, además de realizar un aporte cultural de peso para el país y la provincia de Limón, fue democratizar estos sonidos para que cualquier productor nacional o internacional los utilice con el fin de crear música, siempre y cuando se le den los créditos correspondientes a Donald Williams, Alfonso Gouldbourne y Otilio Brown, miembros de Kawe Calypso.

Cabe resaltar que la idea de esta iniciativa no nació en una tarde. Álvaro Díaz comenta que el proceso de investigación y documentación de información fue bastante arduo y determinante para tratar el tema con el mayor respeto posible. Con la ayuda del antropólogo Ramón Morales, la banda consultó gran variedad de fuentes del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural y la Universidad de Costa Rica, así como documentos digitales sobre la historia del calipso en el país.

“El objetivo fue hacer una apropiación cultural positiva para poder ser como un trampolín para el calipso de acá”, agregó Díaz. Aún con la diferencia de edades y ritmos que tocan, ambas bandas conectaron a la perfección a la hora de realizar este trabajo y dejaron claro que la música no es solo un canal para comunicar ideas sino también una motivación fortuita de la acción social. Los integrantes de Rombos afirman que no se hubieran imaginado este proyecto si no hubiera sido al lado de Kawe Calypso.

Acá les dejamos el link de descarga de la librería de sonidos, ojalá le saquen bastante provecho y lo disfruten tanto como nosotros: